La gran banca española (Santander Esp., BBVA Esp., CaixaBank Esp., B.Sabadell Esp., Unicaja Banco y Bankinter) continúa con un ascenso en sus resultados, que incluso han superado las expectativas previstas. El informe del primer trimestre de 2023 sobre Banca, elaborado por la consultora Neovantas, presenta unos beneficios que han ascendido a 2.133 millones de euros dentro del territorio español, lo que supone más de un 7,6% con respecto al primer trimestre del pasado año. Hay que destacar que este beneficio ha sido reducido por el impuesto extraordinario (1.120 millones de euros), pero impulsado por el aumento sustancial del margen de intereses en más de un 40% interanual (i.a.), derivado de las subidas de los tipos de interés que se llevan sucediendo en los últimos meses.
En este primer trimestre, las comisiones no han contribuido a una mayor subida del beneficio agregado, ya que se han situado en un -0,9% (i.a.), así como los gastos de explotación se han mantenido constantes con un -0,2% (i.a.), debido a que las entidades continúan con los esfuerzos de optimización y racionalización de sus operaciones para minorar los efectos de una inflación que eleva las rentas por alquiler y encarece muchas otras partidas. Por otro lado, con respecto a las provisiones, cada entidad ha realizado una estrategia diferente en este periodo, si bien a nivel agregado ha aumentado un 46,1% (i.a.), siguiendo la línea de los grandes bancos americanos que ya empiezan a incrementar esta partida en previsión de un repunte de la morosidad.
Según José Luis Cortina, Presidente de Neovantas, «sin embargo estos resultados a nivel global de la gran banca durante este periodo hay que recibirlos con prudencia de cara a su posible evolución futura. Por un lado, el entorno macroeconómico es incierto como consecuencia de la guerra de Ucrania y Rusia, las tensiones entre USA y China, así como el riesgo de la suspensión de pagos en el que pudiera incurrir Estados Unidos este verano. La evolución no prevista en cualquiera de estos temas cambiaría variables macroeconómicas clave que impactaría en la economía global y, por ende, en la gran banca española».