Clientes y empleados son una fuente de información que la gran mayoría de las organizaciones no analizan con la profundidad y sistemática suficientes, sin pensar que de sus opiniones se pueden extraer una gran cantidad de conocimiento para alcanzar sus objetivos. Debido a ello, el sector de Retail está empezando a avanzar en la explotación del Big Data y de este esfuerzo se verán recompensadas las empresas en un futuro inmediato, consiguiendo reforzar su posición en un sector que cada vez es más competitivo.
«Ante esta situación», afirma José Luis Cortina, Presidente de NEOVANTAS, «nace el reto para las compañías de Retail de consolidar toda la información interna y externa, estructurada y desestructurada, y extraer valor de negocio de la misma, con el fin de tener una visión integral de sus clientes y ser capaces de tomar decisiones estratégicas y tácticas que maximicen los resultados. Entre este tipo de decisiones se encuentran la personalización de ofertas ad-hoc para los clientes, el diseño de programas de fidelización o la confección de estrategias para aumentar la recurrencia de las compras y el importe medio por compra».
En este sentido, se trata de trasladar el concepto que ya se desarrolla en varios de los sectores más competitivos, como Banca y Telecomunicación, a la industria de Retail. Al combinar la explotación exhaustiva y sistemática del Big Data, incluyendo todas las fuentes de información, con un enfoque eminentemente de negocio, las empresas de Retail pueden generar impactos significativos en diversas áreas clave, como son:
- Relación con clientes. Proporcionar información no sólo sobre quiénes son sus clientes, sino sobre dónde están, qué quieren, cómo y cuándo desean ser contactados.
- Fidelización y retención de clientes. Descubrir qué influye en la fidelidad de los clientes y qué hace que acudan a sus instalaciones asiduamente.
- Demanda predictiva. Inferir tendencias temporales y de estacionalidad en la demanda de productos en distintas localizaciones. Adicionalmente, la capacidad de predicción permite optimizar los sistemas logísticos y costes de almacenaje.
- Optimización de precios. Ajustar en tiempo real los precios en base a aquéllos de los competidores y a los sentimientos de los clientes respecto al nivel de precio ofrecido por la organización.
- Venta cruzada. Analizar los productos susceptibles de ser comprados conjuntamente por los distintos segmentos de cliente, pudiendo además diseñarse campañas de descuentos personalizadas.
- Optimización de otras acciones de marketing. Perfeccionar acciones tales como diseño de catálogos, marketing en punto de venta, diseño de lineales, etc.
Asimismo, se presentan importantes desafíos relacionados con el uso eficaz del Big Data en el mundo Retail entre los que cabría destacar: